Demanda por indemnización por mala fe de primeras partes y terceras partes

Siempre que debe presentar una demanda por indemnización tras sufrir lesiones en un accidente, espera que las compañías de seguros la gestionen con profesionalismo y rapidez. Esto es así tanto si presenta una demanda ante su propia compañía de seguros como si lo hace en virtud de la póliza de la parte negligente. Sin embargo, esto no siempre ocurre. Si una compañía de seguros no le trata adecuadamente o no concilia su demanda de forma razonable, podría estar ante una demanda de mala fe contra la compañía que podría otorgarle el derecho a una indemnización adicional superior a lo que se le debe por su demanda.

Demanda de mala fe de primera parte

Una compañía de seguros tiene el deber fiduciario para con el asegurado de buscar la forma de pagar una indemnización legítima, cooperar con él en la liquidación de la indemnización y pagarla sin demora. Cuando una compañía de seguros incumple estas y otras obligaciones, el tenedor del seguro podría presentar una demanda por seguro de mala fe en primera instancia contra la compañía de seguros. Entre las formas en que la compañía de seguros podría incurrir en prácticas de mala fe se incluyen las siguientes:

• Rechazar la demanda por razones ilógicas.
• No comunicar al asegurado el motivo de la denegación de la demanda.
• No investigar la demanda.
• Ofrecer una indemnización muy inferior a la que le correspondería.
• No comunicarse con el asegurado en relación con su demanda.
• Bloquear las negociaciones para llegar a un acuerdo o interponer obstáculos irrazonables a la resolución de la demanda.
• Retrasar o no pagar el importe de la indemnización.

Demanda de mala fe de tercera parte

Aunque la compañía de seguros de la parte negligente tiene menos obligaciones con la víctima que presenta una demanda que con su asegurado, sigue teniendo la obligación de investigar la demanda y resolverla en un plazo razonable. La compañía de seguros puede actuar de mala fe tanto en sus relaciones con su asegurado como con la víctima. Aquí presentamos algunos ejemplos de acciones de mala fe de terceros:

• Retrasar injustificadamente la decisión sobre una demanda.
• No defender una demanda si su asegurado es demandado.
• Interpretar de forma irrazonable una disposición de la póliza de seguro para denegar o limitar la cobertura.
• Amenazar al asegurado.
• No celebrar un acuerdo de conciliación razonable para la víctima del accidente.
• No investigar la demanda ni hacerlo de forma adecuada.

¿Cree que su compañía de seguros o la de la parte negligente actúa de mala fe al resolver su demanda? Necesita la ayuda de un abogado con experiencia para resolver su demanda de mala fe contra el seguro. Nuestro cualificado equipo jurídico está aquí para ayudarle a luchar por la indemnización que merece. Llame a nuestra oficina, programe una consulta gratuita y conozca sus derechos legales y cómo podemos ayudarle a obtener justicia.